Son algunas de las preguntas que me hacia ayer en una comida. Me encontraba comiendo y en la mesa de a lado había una familia que comía con sus dos hijos y a los que cariñosamente los llamaban como Gordito y como Cochisita.
Lo que llamo la atención es que el mismo apodo que le decían al niño era el mio de pequeño y hasta el mi entorno familiar mas cercano, y de como este me llego a afectar en lo que era un tema de control de peso.
Un apodo es básicamente una etiqueta es algo que te colocan en la frente y es lo que ves cuando vas a estar con alguien. Como ejercicio imaginate ir a haber con una persona y que esta tenga un papel en la frente que diga "Mal caracter" o "Mentiroso", es basicamente como te llega a percibir el entorno.
Esto hace que el entorno no solo piense que esta bien que el sea de esa manera sino que te impulsan a que se mantenga la misma situación, por que llega a ser como que eso es lo que eres.
Por ejemplo seguramente alguna vez escuchaste o te dijeron alguna de estas; "Mi Gordito", "Cochisita", "Gordolfo", "Jirafa", "Mi enana bella", "Chaparro", "Mi pitufa" son personas que tienden a comer mas, a ser mas jorobados o a generar autoestima baja, por que es su mente esta el tema de que DEBEN ser gordos, deben ser feos por que es SU IDENTIDAD.
O esta en caso de que es contraproducente por que vez gente gorda que deja de comer o gente alta que se encorva con la finalidad de bajar su talla.
Ahora se que esto contradice la frase de se feliz como eres, el tema pasa por que no eres feliz por que lo que haces es simplemente aceptar lo que pasa. Pero la autoestima no es algo que todo el mundo logra desarrollar pro que estos apodos comienzan a muy temprana edad.
Mi hermana mayor se llama Marta, pero mi tío la llamó Negra desde que nació, porque era blanca pero de pelo negro.
Tener dos nombres es una pesada carga, produce problemas de identidad, baja autoestima y uno se siente como si fuera dos personas.
Los sobrenombres dejan una huella profunda a nivel neuronal, o sea que influyen en la química de las conexiones nerviosas del cerebro y pueden condicionar la conducta.
Sin embargo, la plasticidad cerebral permite salir de ese condicionamiento y dejar de ser el “Gordo” o el “Loco”, porque también depende en gran parte de ellos mismos.
Lo que más puede afectar es el rótulo despectivo que ponen los seres queridos, porque son los que se consideran ciertos, los que se creen, los que convencen a la persona que fue etiquetada así, de que es inútil pretender ser alguien diferente.
Todas las personas desde que nacen son dignas de respeto, y denigrar con un sobrenombre humillante a alguien que no se puede defender porque es pequeño, es cosa de cobardes; de personas resentidas que necesitan agredir a los débiles porque saben que no pueden responder adecuadamente.
ETIQUETAS NEGATIVAS:
El otro tema es que los apodos no son en positivo todos ellos te buscan resaltar una cualidad negativa del individuo y por ende degradar su condición humana. Son aquellas que censuran o que te desaprueban. Contribuyen a un descenso bastante importante de autoestima.
Entre este tipo de etiquetas podemos encontrar: “el gordo”, “el enano”, “el vago”,… Aunque no son las únicas etiquetas que le pueden afectar
CONSECUENCIAS
Los apodos empiezan a aparecer sin ninguna intención ofensiva a partir de los 4 años, pero empiezan a molestar a quienes los reciben. Estos suelen basarse en etiquetas sobre su aspecto físico, raza, clase social, capacidades, etc.
Este tipo de conducta es considerado como bullying y los niños que son más propensos a sufrirlo son aquellos que presentan un retraso madurativo en su desarrollo, como por ejemplo crecer más despacio. Esto hace que se vean más débiles que el resto y como consecuencia su desarrollo emocional sea también más tardío.
Los apodos afectan la autoestima de los niños, generándoles problemas de identidad. Sobre todo cuando, son discriminatorios, resaltan defectos físicos o de comportamiento, cuando son ofensivos y en los casos en que son degradantes. Esto hace que de manera inconsciente el niño adopte un estilo de vida lleno de sentimientos de inferioridad.
QUE PUEDE HACER UN NIÑO FRENTE A LOS APODOS
Los expertos coinciden en que el daño es mayor si el niño no puede defenderse o resolverlo por sí mismo. Por tanto la mejor manera de evitar que los niños sean víctimas de este tipo de acoso es importante que aprendan a:
- Expresar claramente sus sentimientos.
- Marcar los límites con los demás. Saber decir No.
- Mostrar respeto hacia los demás para poder exigirlo.
- Trabajar la autoestima. Todo el mundo es igual de importante que los demás.
- Ser tolerante con los demás.
QUE PUEDE HACER UN ADULTO
Lo primero es respetos guardan respetos, cada ser humano (al menos todos los que yo conozco) tienen un nombre, usa para referirte con cada amigo, colega o pareja.
Algunos consejos son:
Se sincero con tu familia ser claro "NO ME GUSTA QUE ME LLAMEN DE ESA MANERA" no hay por que soportar cosas que no te gustan de nadie.
Se empatico y piensa a quien conozco al que lo llamo por su apodo por el simple hecho de que "Todos lo hacian".
O usar una frase como "Buen dia, como esta mi nombre es Horacio" (Esta ultima que la use con muchos de mis familiares y amigos de infancia ).
Y por ultimo hay amigos tóxicos que no dejaran de hacerlo "Por que es su cariño" lo mejor es alejarse de a poco y simplemente cortar con el pasado.
Antes de poner un sobrenombre a alguien hay que pensarlo muy bien, principalmente si es de la familia; intentar primero ponerse en su lugar y tomar conciencia que a esa persona seguramente le será difícil erradicar ese apodo mientras viva; que se convertirá en una carga más de las muchas que deberá llevar en su vida.
Y recuerda que debes ser FELIZ con lo que eres, aprender a amarte a ti mismo y habla con tu entorno (amigos, familia o pareja) para que sepa que no aceptas ese apodo, que no es de tu agrado y que no tienes por que aguantarlo.
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